Publicado en ABC
La Asociación de Vecinos Al-Sagra denunció ayer la «falta de transparencia informativa» del Ayuntamiento de Illescas y de la Consejería de Cultura en el hallazgo y excavación de las tumbas visigodas del polígono industrial Boadilla de Arriba.
Según indicó en un comunicado la asociación, en el PAU promovido por Carvier S.A. se descubrió en 2005 el yacimiento de una necrópolis visigoda con más de 280 tumbas acompañadas de un rico ajuar, que data del siglo VI.
Al-Sagra dice que ni el Ayuntamiento ni la Consejería de Cultura han atendido la solicitud y el interés de la asociación de vecinos, a la que aseguran le han negado hasta la fecha todo tipo de información sobre el descubrimiento.
La asociación dice que el Ayuntamiento ha sacado a exposición pública el estudio de impacto ambiental de dicho polígono en trámite de urbanización, sin que figure en el expediente las preceptivas descripción y valoración del yacimiento.
También señala que la Consejería no considera a la asociación parte interesada para conocer esos datos, lo que la impide ejercer el derecho a la acción pública, que reconoce la propia Defensora del Pueblo al admitir a trámite la queja presentada por la Asociación de Vecinos Al-Sagra.
Obras «ilegales»
Además, la asociación denuncia que el Ayuntamiento ha permitido la realización de obras de urbanización en este polígono, que Al-Sagra considera ilegales al no contar con los permisos y licencias que la asociación entiende serían obligatorios con carácter previo.
Al-Sagra dice que la Dirección General de Patrimonio y Museos autorizó la excavación del yacimiento y su estudio correspondiente al equipo de arqueólogos de la empresa urbanizadora Carvier S.A. y que ha trasladado los restos y piezas para su catalogación al Museo de Santa Cruz.
A juicio de la asociación, si el Ayuntamiento y la Consejería de Cultura tienen interés en llegar al fondo de los hallazgos, deberían preservar la zona de actuaciones urbanísticas para conservar un más que probable abundante patrimonio arqueológico, a raíz de las múltiples prospecciones realizadas en la zona con resultados positivos.
La Asociación de Vecinos Al-Sagra exige al Ayuntamiento y al Gobierno de Castilla-La Mancha una actuación «transparente y firme» en la defensa del patrimonio histórico frente a la amenaza de un «modelo de urbanismo depredador».
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